Un francés de 64 años sufrió
lesiones en la espalda cuando se eyectó de la cabina de un caza biplaza
Rafale-B durante el despegue de un vuelo de entrenamiento. La insólita
historia, que se produjo en marzo de 2019, figura en
un informe publicado por la Oficina de Investigación y Análisis francesa, esta semana, que
precisó que el sujeto había recibido el viaje de observación como regalo de
jubilación de parte de sus compañeros. El pasajero, que "no pertenece al
Ministerio de Fuerzas Armadas [francés]", se eyectó al agarrar la
palanca de eyección de la aeronave cuando entró en pánico durante el despegue.
Un informe final describió que el civil, cuya frecuencia cardíaca se registró
en hasta 142 latidos por minuto, "nunca expresó el deseo de llevar a cabo
este tipo de viaje en Rafale," señala Daily Mail. La posterior
investigación reveló que la visera del casco estaba levantada, no
llevaba puestos correctamente los pantalones antigravedad, y que su casco y su
máscara de oxígeno no estaban unidos debido a insuficientes controles de
seguridad. El piloto logró aterrizar el avión con heridas leves en las manos
causadas por la cubierta rota. Como consecuencia del incidente, parte de la
flota francesa de Rafale se mantuvo en tierra varios días como medida
de precaución mientras se investigaba el incidente, según The Aviationist. (Source/Photo: Various Media)
Un francés de 64 años sufrió
lesiones en la espalda cuando se eyectó de la cabina de un caza biplaza
Rafale-B durante el despegue de un vuelo de entrenamiento. La insólita
historia, que se produjo en marzo de 2019, figura en
un informe publicado por 
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